El apartamento, en cuanto a mobiliario, situación y limpieza, muy satisfactorio. Destacar la impresionante terraza con vistas al mar. Echamos en falta una plancha (aunque sí estaba la mesa). Lo comunicamos a la agencia, pero no nos dieron solución. El aspecto exterior de la urbanización da sensación de falta de mantenimiento. Nos enteramos de que en la misma hay varios apartamentos donde se instalaron okupas. En el parking hay hasta cuatro turismos y furgonetas que parecen abandonados, con ruedas pinchadas, cristales bajados, suciedad acumulada, etc, lo que deteriora la imagen de la finca. La puerta de acceso vehicular, por lo que nos informaron, está permanentemente rota, ya que se arregla y en seguida la revientan.
Como dato positivo, la urbanización dispone de vigilante jurado 24 horas y servicio de limpieza y jardinería a diario.